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Siberia: la cuestión de la lengua materna
Publicado por Emilie Maj el October 24, 2011
Por Emilie Maj, investigadora en el Museo del Quai Branly y asociada en la Universidad de Tallinn.
La gran mayoría de las lenguas siberianas se encuentran en una situación alarmante, pese a la legislación rusa aparentemente favorable: oficialmente los derechos iguales son reconocidos en todas las lenguas de los pueblos de la Federación de Rusia y todas estas lenguas pueden beneficiar del apoyo del Estado.
En realidad, después de haber sufrido la política soviética, actualmente han hecho frente a la uniformización realizada en torno al ruso. En causa: el éxodo rural y las difíciles recomposiciones sociales en razón de la evolución de la economía hacia una marcha global.
¿Cúantas lenguas siberianas hay en Rusia?
La filial siberiana de la Academia de las Ciencias de Rusia cuenta con cuarenta y dos lenguas siberianas, reagrupadas en tres grandes familias: las lenguas altaicas, las lenguas uralianas y las lenguas paleoasiáticas.
Cinco de ellas son lenguas del estado: el altaïen, el komi, el touva, el bouriate y el Iakoute (también llamada saja).
Treinta y cuatro lenguas son designadas como las de “pueblos autóctonos poco numerosos”.
En cuanto a las lenguas restantes, no poseen estatuto particular, pues son consideradas como dialectos derivados de las primeras.
Muchas lenguas en peligro
Para cada una de estas lenguas, el número de hablantes se extiende de algunas decenas a muchas centenas de millares.
En lo que concierne a los menos expandidos, la UNESCO cuenta como “seriamente en peligro”, entre otras:
– el nénets : aproximadamente 2000 hablantes oficiales
– el nganasan : aproximadamente 1000,
– el mansi : aproximadamente 3000,
– el kète : aproximadamente 500,
– el nanaï : aproximadamente 5800,
– el nivkhe : aproximadamente 1000 hablantes.
Por otra parte la UNESCO ha anunciado « en vías de extinción” » a tales lenguas:
– el selkoupe : más de 500 hablantes,
– el mansi de l’Est : aproximadamente 500,
– el tofalar : aproximadamente 300,
– el oultche : aproximadamente 1100,
– el oudégué : aproximadamente 500,
– el orotchone : aproximadamente 150,
– el néguidal : aproximadamente 150,
– el ioukaghir : aproximadamente 100,
– el itelmen : aproximadamente 500,
– el nivkh : aproximadamente 500.
Es necesario hacer notar que las cifras oficiales no reflejan forzosamente la realidad. Por ejemplo, para el ioukaghir, el número real de hablantes se cuenta más bien como los dedos de la mano. En todo, una treintena de lenguas, de hecho, corren peligro de desaparecer en un futuro más o menos próximo.
¿Qué lengua materna?
El asunto de la lengua materna constituye un punto sensible: en Siberia, los autóctonos practican a veces el ruso en vez de su lengua materna, aprendida durante la infancia y olvidada en la escuela donde predomina el ruso. En ciertos casos, la aculturación conduce incluso a un olvido de la lengua autóctona, a pesar de ser su primera lengua.
Finalmente, entre aquellos que la lengua autóctona no les ha sido transmitida y aquellos que han olvidado, los hablantes son cada vez menos numerosos. Así, de los 22.500 khants, solamente el 67 % consideran el khant como su lengua materna. Y esta cifra desciende hasta el 37 % en los mansi…
Las lenguas siberianas en la escuela
Actualmente, casi el ¼ de las lenguas de Siberia son enseñadas en las clases primarias. Pero el número de horas es insuficiente y la enseñanza misma es dispensada en ruso. Además, aunque el niño estudie la lengua de su pueblo en las clases menores, no es seguro de que pueda continuar haciéndolo en la escuela secundaria.
Algunas unidades administrativas, tales como la República Saja (Yakutia), tienen abiertas las “escuelas nacionales”, donde las materias son enseñadas en la lengua saja hasta el examen gubernamental que los alumnos lo pasan a los diecisiete años. Pero estos establecimientos guardan el privilegio de la élite: son poco numerosos y los padres se lamentan de no poder inscribir allí a sus niños, falta de lugar.
Un multilingüismo en varios pisos
Las lenguas más amenazadas son generalmente aquellas de pueblos que viven en las repúblicas que ellas mismas tienen otra lengua nacional que el ruso. Estas “pequeñas lenguas” entonces deben hacer frente a dos hegemonías: la del ruso y la de la segunda lengua local oficial.
Para hacer frente a los vacíos de la legislación de la Federación rusa, algunas de estas repúblicas, como la de Saja (Yakutia) y la de Bourriatie, anuncian una política de apoyo a estas lenguas minoritarias: les conceden en efecto el estatuto de lengua oficial en las regiones donde los pueblos que las hablan están en fuerte concentración.
Con todo el observador puede preguntarse si el éxito de esta república esta probado. Basta con volver a la región eveno-bitantaï, al norte de la república Saja, para tener un ejemplo de una situación típica para el país: la región está calificada de “nacional” porque está constituida de una mayoría de edenes. Pero en realidad, estos edenes han sido asimilados a los sajas durante el período soviético y no hablan más que su propia lengua.
Desde entonces se llega a situaciones ubuesques por ejemplo, la pequeña Natacha, proveniente de una familia mixta evene/saja, habla saja en la casa como todos los habitantes del pueblo. En la escuela, por supuesto, ella estudia el ruso. También estudia el evene, lengua minoritaria « oficial », pero que no le sirve en la vida diaria porque en la región nadie más la habla. En cambio, ella no estudia el saja, su lengua materna y la segunda lengua oficial del país, la que le servirá más en su vida de adulta.
Este ejemplo concreto muestra que la cuestión de lenguas autóctonas es un punto sensible en la que la solución se hace caso por caso. Desgraciadamente, el tiempo apremia y no está seguro que las políticas encuentren a tiempo soluciones eficaces para administrar esta complejidad.
Algunas fuentes para consultar en lengua francesa.
CONSEJO DE EUROPA 2007, Comité Consultivo de la Convención-Marco por la protección de las minorías nacionales. Strasbourg, 2 mai 2007, ACFC/OP/II(2006)004, Segunda Opinión de la Federación de Rusia, adoptada el 11 de mayo de 2006. http://www.coe.int/t/dghl/monitoring/minorities/3_FCNMdocs/PDF_2nd_Com_RussianFederation_fr.pdf (última consulta de 19/09/2011)
ISOHOOKANA-ASUNMAA Tytti (ponente) 1998, Assemblée parlementaire du Conseil de l’Europe, Doc. 8126 du 2 juin 1998, Cultures minoritaires ouraliques en danger, Rapport de la Commission de la culture et de l’éducation, http://assembly.coe.int/Documents/WorkingDocs/doc98/fdoc8126.htm (dernière consultation le 19/09/2011)
LAVRILLIER Alexandra (à paraître), Parlons toungouse (pronto en el Harmattan)
MAJ Emilie et LEBERRE-SEMENOV Marine 2010, Parlons sakha. Langue et culture iakoutes. L’Harmattan
Maj Emilie 2009. Interpretar el diálogo intercultural entre rusos y pueblos autóctonos de la República Saja (Yakutia), in K. HADDAD, M. ECKMANN, A. MANÇO (éds), Antagonismos comunitarios y diálogos intercultureles, Paris, L’Harmattan, coll. « Competencias interculturales », 2009, L’Harmattan, Paris, pp. 63-83
PERROT Jean 2006, Regards sur les langues ouraliennes. Etudes structurales, approches contrastives, regards de linguistes, L’Harmattan (Bibliothèque finno-ougrienne)
TERSIS Nicole, THERRIEN Michèle 2001, Langues eskaléoutes : Sibérie, Alaska, Canada, Groenland, CNRS Paris
WEINSTEIN Charles 2010, Parlons tchouktche : une langue de Sibérie, L’Harmattan