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Un proyecto para documentar lenguas en peligro
Hoy en día existen 6.000 lenguas en el mundo, una de cada dos corre el riesgo de extinguirse antes de que acabe este siglo. Y entre las 3000 lenguas amenazadas de extinción, la mayoría de ellas ni siquiera cuenta con textos escritos, lo que significa que no existen documentos escritos, diccionarios, gramáticas, que nos permitirían preservarlas. Por lo tanto, cuando el último hablante muera, perderemos definitivamente su lengua y los conocimientos que transmitía.
Durante décadas, investigadores, lingüistas y antropólogos, cumplen una fantástica labor y consiguen que poco a poco se vayan sacando del olvido muchas lenguas que estaban predestinadas a desaparecer de la memoria humana, si ese trabajo de descripción y escritura no hubiera sido llevado a cabo. Nuestro objetivo es completar el trabajo de los científicos gracias a nuestro material audiovisual grabado de manera profesional.
Los rodajes y la colecta de imágenes
Por eso, Sorosoro acompaña a los investigadores y envía sus equipos de rodaje para consignar en imágenes y sonidos lo que constituye la esencia de una lengua, de una cultura, respetando un plan de trabajo establecido por los científicos. Nuestros equipos traen de sus rodajes, decenas de horas de material audiovisual grabado de cada lengua estudiada.
La preservación de datos
Paralelamente, se está llevando a cabo, un plan de preservación de todos los documentos recopilados, una labor efectuada conjuntamente con el INA (Instituto Nacional del Audiovisual) para salvaguardar todos los datos de manera perenne. Ese plan se desplegará en tres fases:
- digitalización sistemática;
- almacenamiento en un lugar ad hoc, procediendo continuamente a volver a hacer copias integrales para evitar la destrucción progresiva del material grabado;
- clasificación e indexación de documentos que permitan un acceso fácil a los datos.
Una base de datos con vocación enciclopédica
Las imágenes y los sonidos grabados, asociados a datos escritos procedentes de la investigación académica (transcripciones, traducciones, meta-datos etc.), formarán de ese modo una base de datos que se ira enriqueciendo con el transcurso de los años.
Disponible para los científicos y los investigadores, esta « enciclopedia » con imágenes, sonidos y textos representará también para las presentes y futuras generaciones un verdadero receptáculo de conocimientos sobre las lenguas y culturas amenazadas de extinción.