El 2 de noviembre de 2001, la Unesco adoptaría de Declaración universal sobre la diversidad cultural. Esta declaración reconocería, por primera vez, la diversidad cultural como « herencia común de la humanidad » y consideraría su salvaguardia como un « imperativo concreto y ético inseparable del respeto de la dignidad humana ».

Luego de esta declaración, la Asamblea general de las Naciones Unidas proclamaba el 21 de mayo como « Jornada mundial de la diversidad cultural para el dialogo y el desarrollo ».

Este día debe permitir reflexionar y aprender a « vivir mejor juntos », sin dejar de apreciar las aportaciones de cada cultura, su unicidad, su complementariedad y su solidaridad.

Tendrá por objeto también poner en evidencia la relación esencial que existe entre la cultura y el desarrollo, así como el papel fundamental de las técnicas de la información y de la comunicación en esta relación.

Es alrededor de este día que se articula el Festival internacional de la diversidad cultural (17-26 de mayo de 2010), organizado por la Unesco. Este festival hace un llamado a todos, y se lleva a cabo en París, Beijing, Montreal, Fez, Guangdong, Fabriano, Shenzhen, etc…

En el programa: conciertos, proyecciones, exposiciones, representaciones teatrales, espectáculos de danzas, mesas redondas etc.